Coaner, un pueblo milenario escondido en los bosques del Bages

Un viejo dicho catalán dice «La Mare de Déu de Coaner, que tothom l’anomena i ningú sap on és». Y es que el viejo pueblo de Coaner estará bien escondido… hasta que leas este reportaje.

 

Sant Joan les Fonts, entre fuentes de agua y coladas de basalto

Sant Joan les Fonts es uno de los lugares más ricos de la Garrotxa, no en términos económicos sino geológicos, históricos y patrimoniales. En esta ruta vamos a poder conocer un poco de cada cosa.

 

Un tesoro escondido, el Salt del Roure en la riera de Joanetes

A los pies del Puigsacalm y rodeado de exuberante vegetación existe un lugar de esos que te dejan con la boca abierta porque por más fotos que has visto no te lo esperas así. Es el Salt del Roure en la riera de Joanetes.

 

El Bosc de les Agudes, la riera de Breda y la Font de la Pintoresca

En el extremo más oriental del Parque Natural del Montseny, en el término municipal de Breda, existen rincones tan poco conocidos como la Font de la Pintoresca o el Bosc de Les Agudes. Nos son lugares de incomparable belleza pero vale la pena acercarse a conocerlos.

 

Pozas escondidas de la Riera del Molí en Sant Jaume de Frontanyà

San Jaume de Frontanyà, hasta hace poco el municipio menos poblado de Catalunya, se encuentra rodeado de bosques, pastos, torrentes y rieras. Su localización tan apartada lo convierten en un lugar muy diferente a los municipios que lo rodean. Vamos a atravesar esos bosques en busca de dos pozas en la Riera del Molí: el Gorg Blau y el Gorg del Matxo.

 

El Gorg del Salt y otros refrescantes rincones de la riera de Mergançol

Cuando el calor aprieta sólo nos apetece ir a lugares donde refrescarnos en contacto con la naturaleza, y uno de ellos es el Gorg del Salt de Borredà, en la riera de Mergançol.

 

La Riera de Sallent, o cómo el frío puede ser un obstáculo insalvable

La nieve y el hielo suelen ser un aliciente para salir al monte a hacer fotos, pero en ocasiones el frío puede impedir que consigas tu meta, como esta vez en que me quedé a pocos metros de ver el Salt de Sallent de Sant Privat d’en Bas y me tuve que conformar con ver la Riera de Sallent helada.